A mi gran familia…

Algunas cosas que eran privadas, ahora las dedico a mi gran familia que ya no es sólo de relación sanguínea, es de alma y corazón, decidiendo compartir lo que existe dentro de mi, para transmitir y dejar una huella de lo que quiero q conserven de mi…

El hambre de la eternidad, el suelo de la inconciencia,
el corazón de la inocencia y el ansia de descubrir.

Cada día perseguir un sueño, llorar y caerse,
reír y levantarse, para siempre proseguir…
el brillo de una estrella, que te alumbra
el sol interrumpiendo el sueño y el delirio de mi amor por ti.

El tiempo que se escapa como agua que lucha entre las manos,
el universo escuchando los murmullos, todo eso que se vuelve subir una montaña y es tan solo vivir…

Vivir creando un sueño, acompañado de ti…

Gracias por ayudarme a cumplir todos mis sueños y seguirme en esta travesía que representa la vida…

2.12.09

Pero tú no sabes...


Pero tú no sabes…
que me elevas por dentro como vuelan las aves,
haciendo cantar a las flores en este día
por haber sido parte de mi vida,
donde juntos nos unimos en armonía…

Y es allí donde libero a mis sueños,
saliendo a trasnochar, lunas y estrellas
escribiendo tu nombre en la más bella,
y aunque el mar borró mis huellas,
el corazón guarda las reseñas de cuanto te amé.

Porque el amor es una hoguera que arde a su manera,
esparciendo su calor por dondequiera,
haciendo levitar mi ser, buscando ese rincón tuyo
donde permanecer para convertirme
en la dicha que te hará renacer.

No sabes que solo tú tienes poder sobre mi ser,
pero, nuestros mundos son tan lejanos
que el tiempo es un tirano,
te arranca las caricias que hay entre tus manos,
volcándose a ciegas en lo que llamas el destino
que sólo enloda tu camino…

Difícil se hace el andar casi imposible llegar
hasta el ser que se desea amar.

Pero tú, mi corazón ... ¡camina con la frente en alto!
sin duda, sin sobresalto, como queriendo desafiar
a quien se ufane en lastimar.

Porque tú no sabes…
que siempre habrá un disfraz para vestir de gala y de alegría
la pena que duele más…¡ya lo verás!
y no olvides que existe esa mágica sorpresa
que no da esa boca que te besa… si no la que te quiere amar,
aunque el ser que tanto amas, no se quiera enterar
y por eso te perderá…

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