A mi gran familia…

Algunas cosas que eran privadas, ahora las dedico a mi gran familia que ya no es sólo de relación sanguínea, es de alma y corazón, decidiendo compartir lo que existe dentro de mi, para transmitir y dejar una huella de lo que quiero q conserven de mi…

El hambre de la eternidad, el suelo de la inconciencia,
el corazón de la inocencia y el ansia de descubrir.

Cada día perseguir un sueño, llorar y caerse,
reír y levantarse, para siempre proseguir…
el brillo de una estrella, que te alumbra
el sol interrumpiendo el sueño y el delirio de mi amor por ti.

El tiempo que se escapa como agua que lucha entre las manos,
el universo escuchando los murmullos, todo eso que se vuelve subir una montaña y es tan solo vivir…

Vivir creando un sueño, acompañado de ti…

Gracias por ayudarme a cumplir todos mis sueños y seguirme en esta travesía que representa la vida…

28.12.09

Recuerdo


Nos recuerdo en la habitación,
siguiendo el compás del silencio
roto por la canción de tu respiración y mi aliento,
en donde dos cuerpos enmarañados
vivían llenos de recuerdos por lo nunca sucedido.

Nos recuerdo tiñendo de besos al mundo,
atrapados en una furia loca por una cordura mal entendida,
que nos quitaba la noche que nació por las ansias
bajo las mantas que nos protegían.

Te recuerdo entrando en un arrebato exaltado,
robando bajo la luna los besos por ambos deseados,
cuando tus labios irrumpían para encender un suspiro
creando la fusión que entre dos almas ocurría.

Me recuerdo hilando fantasías en tu pelo
susurrándote al oído lo mucho que te había esperado
y tu tiernamente me mirabas
al sentir que temblaban mis entrañas.

Nos recuerdo siendo el viento que no dejó de soplar,
buscando la certeza de dos corazones fusionar,
encontrando la calma en nuestras perdidas pieles
envueltas en misterio de todo aquello que nos hace falta.

Te recuerdo pintándome ilusiones con tus manos suaves
al despertarme a cada instante dentro de un sueño,
alimentando mi vida con tu aliento por sentirte anudado
en mi pecho, cubriendo con tu silueta mi cuerpo.

Me recuerdo encendiendo el cielo por sentirte palpitar,
descubriendo una sonrisa que en ti es sin igual,
encadenada a tus ojos que me mostraron la libertad.

Nos recuerdo siendo el silencio que nadie podrá callar…

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